sábado, 18 de septiembre de 2010

No podía quitarle ojo a mi objetivo.
-Esperare a la noche para bajar y ver si tenemos vehículo – le comente a David totalmente convencido de mis palabras.
- No te das por vencido
- No, mientras tenga la esperanza de encontrar a mi familia con vida, no
Planteé la situación al grupo esperando que alguno de ellos, al igual que cuando salí de Ática, intentara frenarme, pero creo que todos sabían que mi decisión estaba tomada.
- Me gustaría tener las ideas tan claras como tú –me comentó Juanma
- Si tienes la mas mínima esperanza de que tu familia esta viva, yo mismo iré contigo a buscarlos, lo que no puedo hacer es quedarme de brazos cruzados esperando, sobre todo por que no se que esperar.
- Quizás el gobierno esté trabajando en una cura
- Juanmita, no te engañes, ya no hay gobierno ni nada que se le parezca, esto es el Apocalipsis total, acompáñame y te prometo que después de ir a buscar a mi familia, iremos a buscar a la tuya.
-Yo iré contigo –dijo Manoli- con la misma promesa, encontremos o no a tu familia, también me llevarás a buscar a la mía.
Yo me apunto –espetó Óscar- aunque viva a tomar de culo de aquí, cuando encontremos a vuestras familias, iremos a buscar a mi gente.
-Yo no me voy a quedar aquí sola, Lola y yo nos apuntamos, cuenta con nosotras – dijo Teresa con los brazos en jarra.
-Esta bien –dije- somos siete y no creo que quepamos muchos más, o encontramos un Hummer de siete o tendremos que buscarnos la vida con otro vehículo

No hay comentarios:

Publicar un comentario